El bajo italiano, que ha interpretado la obra verdiana en más de un
centenar de ocasiones, ahora lo hará en Boston junto al maestro Daniele Gatti. Enero de 2013.
Cuando en 1990 un
jovencísimo Carlo Colombara debutaba en la Messa
da Requiem de Giuseppe Verdi
bajo la dirección del legendario Carlo Maria Giulini, no imaginaba que esta
impresionante obra maestra se convertiría en una de sus mejores cartas de
presentación. A modo de paréntesis en su imparable actividad operística,
Colombara ha llevado la gran misa verdiana (considerada como una ópera más del
genio italiano) a ciudades como Florencia, Roma, Londres, San Petersburgo,
Múnich, Buenos Aires, Santiago de Chile, Parma Zúrich, Pequín, Barcelona,
Toulouse, Dresde, Stuttgart, Marsella, San Sebastián, Vitoria, Bilbao, París,
Estrasburgo, Montecarlo, Nápoles o Modena, en este última, en memoria de
Luciano Pavarotti.
Este debut de
Colombara ante la laureada Boston Symphony Orchestra (17, 18 y 19 de enero)
bajo la dirección de Daniele Gatti, conlleva una gran carga emotiva al celebrar
el nacimiento de Giuseppe Verdi en el año del bicentenario de su nacimiento. En
más de dos décadas con el Requiem verdiano en repertorio, Carlo
Colombara ha podido trabajarlo junto a los directores más destacados de su
generación: por nombrar solo algunos, habría que señalar a Colin Davis,
Giuseppe Sinopoli, Riccardo Muti, Daniel Oren, Zubin Mehta, Myung-Whun Chung,
Michel Plasson, Rafael Frühbeck de Burgos, Yuri Temirkanov, Helmut Rilling,
Pinchas Steinberg o Gianandrea Noseda
.
Bajo el mando de Gatti
y desde el podio de la Boston Symphony, en las tres sesiones del Requiem que se ofrecerán en la sede de la
orquesta norteamericana en Boston, Carlo Colombara estará acompañado de la
soprano Fiorenza Cedolins, de la mezzosoprano Ekaterina Gubanova, del tenor
Fabio Sartori y del Coro del Festival de Tanglewood.
www.carlocolombara.com
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