lunes, 21 de octubre de 2024

MANDALAS: MAPPING THE BUDDHIST ART OF TIBET

 


A mandala is a diagram of the universe—a map of true reality that in Tibet is used to conceptualize a rapid path to enlightenment. This exhibition explores the imagery of the Himalayan Buddhist devotional art through over 100 paintings, sculptures, textiles, instruments, and an array of ritual objects, mostly dating between the 12th and 15th centuries.


This dazzling visual experience provides a roadmap for understanding Himalayan Buddhist worship through early masterworks, juxtaposed with a newly commissioned contemporary installation by Tibetan artist Tenzing Rigdol.

The exhibition is made possible by the Placido Arango Fund and Lilly Endowment Inc.

https://www.metmuseum.org/exhibitions/mandalas-mapping-the-buddhist-art-of-tibet

BOND IN MOTION. INTERNATIONAL SPY MUSEUM

The International Spy Museum is proud to host this official exhibition of iconic vehicles, all used on-screen by 007 and his many allies and adversaries. While James Bond is a fictional character, he embodies the spirit of many real spies in this museum.These men and women, from around the world, were inspired by over six decades of the Bond film franchise and its enduring cultural influence.

Bond In Motion is a celebration of six decades of 007 vehicles. The exhibition features 17 iconic pieces from the EON Productions Archive and the Ian Fleming Foundation. 

Props, scale models and clips from the films are also on show alongside cars, motorcycles, submarines, and more from the Q Branch garage.

Experience Bond In Motion on display at SPY through April 2025.

https://www.spymuseum.org/bond-in-motion/

MATISSE E LA LUCE DEL MEDITERRANEO. MESTRE

28.09.2024 – 04.03.202

  Centro Culturale Candiani Spazi espositivi II piano Mostra a cura di Elisabetta Barisoni

Il nuovo progetto espositivo pensato per il Centro Culturale Candiani, che nasce dalle collezioni civiche di arte moderna conservate a Ca’ Pesaro, arricchito da prestigiosi prestiti internazionali, è dedicato ad un altro maestro delle avanguardie del ‘900: Henri Matisse (Le Cateau-Cambrésis, 1869 – Nizza, 1954). Maestro e capostipite dei Fauves – le belve, i selvaggi – e perciò posto in mostra e in dialogo con artisti con i quali condivise vicende biografiche e rivoluzioni artistiche; pittore della gioia di vivere, delle emozioni profonde, tradotte in colori forti, vivaci, innaturali.

 E, soprattutto, interprete della luce: centro della ricerca di Matisse, come di quegli artisti che miravano a catturare l’abbagliante bellezza del Mar Mediterraneo, del Midi, il Mezzogiorno francese, luogo fisico e della creazione artistica, il vero protagonista del colore liberato dall’Espressionismo selvaggio. Luce e colore sono quindi il fulcro della rassegna, insieme all’importanza, quasi un’ossessione, del disegno per Matisse. In mostra oltre cinquanta opere, partendo dalle preziose raccolte di grafica della Galleria Internazionale d’Arte Moderna – che annoverano tre importanti litografie dell’artista francese datate agli anni Venti e due disegni appartenenti alla sua produzione del 1947 – poste accanto ai capolavori del maestro provenienti dal Philadelphia Museum of Art, dalla Národní Galerie di Praga, dal Musée des Beaux-Arts di Bordeaux, dal Musée des Beaux-Arts di Nancy, dal Centre Pompidou di Parigi, dal Musée Albert-André di Bagnols-sur-Cèze, dal Museo del Novecento di Milano.

 Sette le sezioni per indagare La modernità viene dal mare, La luce del Mediterraneo, L’età dell’oro, Il Mediterraneo, un paradiso unico, a cui si affiancano le riflessioni sul decorativo e l’ornamento, il fascino delle linee moresche, le languide figure femminili in veste di odalische in Arabesco e decorazione fino alla sintesi perfetta di Lusso, calma e voluttà e del “disegno del piacere”, di cui scrive il filosofo Jean-Luc Nancy. Nasce così spontaneamente il dialogo con diversi autori che hanno lavorato sulle qualità interiori della pittura, inseguendo la poetica: Henri Manguin, André Derain, Albert Marquet, Maurice de Vlaminck, Raoul Dufy e Pierre Bonnard. Ricerche e produzioni distinte creano tuttavia un racconto corale: dall’amicizia tra Derain e Matisse, in viaggio sulla costa mediterranea della Francia nell’estate del 1905, alla centralità di alcuni luoghi, come Nizza, Arles, Saint-Tropez, quest’ultima divenuta icona dell’arte e della cultura del Novecento. 

L’esposizione si chiude con l’ultima rivoluzionaria fase creativa di Matisse. Dal colore alla forma prende avvio dalla produzione dei papiers découpés, fogli di carta colorata ritagliati e incollati nei quali il Maestro francese porta al massimo la sintesi dell’espressione. Dagli epigoni di area veneziana, come Renato Borsato o Saverio Barbaro, alle figurine di Chris Ofili e fino alle composizioni di Marinella Senatore, la dignità del decorativo, dell’ornamento, del disegno e della stilizzazione della figura emerge nell’ultima sezione della mostra come il lascito forse più importante che Matisse fa all’età contemporanea. #MatisseMUVE

https://muvemestre.visitmuve.it/it/mostre/mostre-in-corso/matisse-e-la-luce-del-mediterraneo/2024/03/22911/mostra-matisse-2/

domingo, 20 de octubre de 2024

MARINA, OPERA ITALIANIZANTE EN EL TEATRO DE LA ZARZUELA, UN ÉXITO MUY MERECIDO

Marina, ópera en tres actos de Miguel Ramos Carrión, adaptación de la zarzuela de Francisco Camprodón. Música, Emilio Arrieta. Jueves 17 de octubre.

Estrenada en el Teatro Circo de Madrid, el 21 de septiembre de 1855 (zarzuela) y en el Teatro Real de Madrid, el 16 de marzo de 1871 (ópera)

Nueva producción del Teatro de la Zarzuela



Ficha Artística

Dirección musical, JOSÉ MIGUEL PÉREZ-SIERRA

Dirección de escena, BÁRBARA LLUCH

Escenografía, DANIEL BIANCO

Vestuario, CLARA PELUFFO VALENTINI

Iluminación, ALBERT FAURA

Movimiento escénico, MERCÈ GRANÉ

Video, PEDRO CHAMIZO

Reparto

Marina, SABINA PUÉRTOLAS

Jorge, ISMAEL JORDI

Roque, JUAN JESÚS RODRÍGUEZ

Pascual RUBÉN AMORETTI

Alberto, ANGEL RODRIGUEZ*

Teresa, GRACIELA MONCLOA*

Un marinero, JUAN SOUSA*

Una voz, ROMÁN FERNÁNDEZ-CAÑADAS* y figurantes

*Miembros del Coro Titular del Teatro de La Zarzuela

Coro del Teatro de La Zarzuela, director, ANTONIO FAURÓ

“Y es que no es tan fácil, ¿Verdad?” Barbara Lluch, directora de escena de Marina.

 

La ópera Marina, que se presenta en la temporada lírica 24/25, coincidiendo con la llegada al coliseo de su nueva directora artística, Isamay Benavente, subió ya en 2017 en esta sala.

Se trata de una obra lírica española compuesta por Emilio Arrieta. En principio fue una zarzuela en dos actos con libreto de Francisco Camprodón, estrenada en el Teatro del Circo de Madrid el 21 de septiembre de 1855. A instancias del tenor Enrico Tamberlick, Arrieta la transformó en ópera en tres actos, siguiendo muy estrechamente el modelo donizettiano. El libreto de Camprodón fue reformado por Miguel Ramos Carrión. Se le añadieron tres dúos y un rondó final. Y se estrenó en el Teatro Real de Madrid el 16 de marzo de 1871.

La crítica en general se mostró desconcertada e indecisa con esta partitura, mientras que algunos se dieron cuenta de su calidad —entre ellos Barbieri—, otros la menospreciaron. Solo tuvo diez representaciones en la capital, lo que era muy poco para la época.  A pesar de todo, posteriormente ganó una gran popularidad a raíz de las sucesivas representaciones por toda España.

Son muy famosas piezas como la entrada de Jorge (aria «Costa la de Levante»), la barcarola de Marineros al principio del Acto II, la romanza «Pensar en él», la habanera «Dichoso aquel que tiene» y el brindis del Acto III: «A beber, a beber y a apurar». Los famosos y recordados Alfredo Kraus y Jaume Aragall han destacado como intérpretes de esta zarzuela/ópera.

La acción transcurre en Lloret de Mar y cuenta los amores y desamores de Marina, Jorge y Pascual. Se trata del título más conocido de su autor y de la adaptación lírica más celebrada del periodo romántico en España. Tiene una sensibilidad y un gusto muy verdianos, pero, como se dijo, está presente también la impronta de otros grandes compositores italianos.

Juan Pascual Antonio Arrieta Corera (Puente la Reina, Navarra, 20 de octubre de 1821-Madrid, 11 de febrero de 1894), conocido como Emilio Arrieta, se educó en Madrid con su hermana Antonia, donde inició sus estudios de música. En 1839 su hermana lo llevó a Italia donde estudió piano con el maestro Perelli y armonía con Mandancini, de forma privada. En 1841 ingresó en el Conservatorio de Milán, gracias a la generosidad del conde de Litta, estudió piano y armonía con el maestro Nicola Vaccai (entre 1838 y 1846) y terminó la carrera con premio extraordinario.

Siempre en Italia, en colaboración con el libretista Temistocle Solera, compuso su primera ópera, Ildegonda, estrenada en 1846, con la que obtuvo gran éxito y ganó el premio de composición en la Scala de Milán. De vuelta en Madrid, en 1846 se dio a conocer como director de orquesta en el teatro del Circo, en el que también estrenó en el mismo año una sinfonía.

 Conoció a Isabel II en una fiesta de palacio. La reina lo tomó como profesor de canto, nombrándolo compositor de la Corte tres años después, y ordenó construir un teatro en el Palacio Real donde Arrieta estrenó su primera ópera en 1849 y, posteriormente, sus nuevas óperas: La conquista de Granada (con letra en italiano, también de Solera), en 1850, y Pergolesi, en 1851. En 1871 le fue concedida la Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica y en 1873 fue nombrado académico de la Academia de Bellas Artes de San Fernando en la recién creada sección de música.

El estilo de Arrieta se puede considerar conservador. Las melodías de sus obras fluctúan entre las referencias locales y el italianismo que nunca abandonaría.

  Fernando Pérez Ollo, crítico musical, escribe de Arrieta: «Su gloria se funda en su producción teatral y más en concreto en el papel decisivo que representó en la consolidación de la zarzuela como género. Ese predominio del maestro navarro fue posible por su sentido melódico, en la línea tradicional de Bellini, más que en la renovadora y dramática de Verdi, y por los recursos técnicos —armónicos e instrumentales— que le dio su formación italiana. En este último aspecto, Arrieta fue superior a sus colegas peninsulares.»

José Miguel Pérez- Sierra (1981), director musical titular del Teatro, ha estado eficaz y se trata de un músico también conocido en el extranjero. Tiene una capacidad evidente para concertar y le dedica mucha atención a los cantantes, con quienes establece una relación fluida durante la función. Seguramente porque posee una experiencia destacada en las labores sinfónicas, operísticas y en la zarzuela como género.

La “regia” de Barbara Lluch, habitual del teatro, muy conocida en el foro, preparó un panorama rico, porque tiene la habilidad y talento en este trabajo. Amable desarrollo el planteado por la directora de escena, detallista con la época y las referencias del lugar donde se desarrolla la obra: los pescadores, la playa, el astillero, y todos los elementos de un mar que a menudo parece peligroso y desconocido por el ser humano.

Acompañada por las siempre conseguidas, pictóricas y tiernas escenas de Daniel Bianco, durante muchos años director musical de La Zarzuela, hay una transparencia  ligera, multicolor sobre todo con esa gama pastel que recuerda al pintor valenciano Sorolla, lleno de refinamiento.

Junto a ellos, el vestuario de Clara Peluffo Valentini, elegante, suntuoso, tal vez demasiado para un ambiente marinero, pero muy solar. Las luces de Albert Faura, “la coreografía” (movimiento escénico) de Mercè Granè, con un fatigoso e hiperbólico perpetuum mobile constante, pensada para evitar el horror vacui y mantener la atención. El video de Pedro Chamizo es muy expresivo y ad hoc.   

Sabina Puértolas es una soprano  extraordinaria, con una línea de canto segura, un fraseo inteligente, bella figura, sfumature, filati, fiato, resulta por lo tanto de una expresividad muy clara digna de todos los elogios.

Ismael Jordi (1973), tenor lirico-ligero, muy juvenil, el segundo protagonista, el “gentil uomo” desesperado es un espléndido actor en su rol. Tiene unos agudos luminosos y canta con facilidad y una gran frescura. Parece que fuera el Jorge ideal, el verdadero capitán enamorado en espera de un milagro. Buena dicción española, como sus otros colegas masculinos.

No hay nada que agregar esta vez al conocido y reconocido Pasqual de Rubén Amoretti, bajo, siempre un intérprete extraordinario, vocalmente potente, aquí con la seguridad del hombre de mar, pero en tierra. Sufre un riguroso tormento psicológico y, en dos palabras: estuvo de nuevo a la altura del elogiable rendimiento al que tiene acostumbrado al público.

El cuarto protagonista (“last, but not least”), Roque, es un barítono profundo, generoso, un actor perfecto, apasionado en el fondo, pero aquí misógino, áspero. No apto para el discurso “Me too”. Pero sabe cómo ser delicado y empático con Marina cuando la ve llorosa y desconsolada. Tiene una voz magnífica, con medios vocales muy solventes y en un estado óptimo. Muy adecuado para su personaje.

No hay que olvidarse de señalar el holgado y agradable Alberto de Ángel Rodríguez, la Teresa de Graciela Moncloa, un marinero, Juan Sousa y una voz, Román Fernández-Cañadas y varios figurantes.

Para la velada del 17 de octubre y todas las funciones de Marina en La Zarzuela, se colgó el cartel de “no hay entradas”. El público, ferviente, agradecido, dedicó un torrente de aplausos y una ovación en pie a todos. Elogiaron reiteradamente esta maravillosa actuación. Marina ha sido, sin dudarlo, un éxito de todos. La audiencia de siempre, fiel, efervescente y la absoluta disponibilidad en la Zarzuela de todo un “dream team”: el ámbito musical, teatral, técnico, los gestores y trabajadores/as de sala, han hecho posible este proyecto una vez más: el de un teatro accesible, abordable también económicamente, gratísimo y muy amado. Muy pronto, ya, la próxima.

Alicia Perris





JOANA MALLWITZ CON LA ONE Y FRANCESCO PIEMONTESI AL PIANO, CONVIRTIERON LOS CONCIERTOS EN EL AUDITORIO NACIONAL EN UN PARADIGMA MUSICAL. OVACIONES.

Concierto sinfónico 4. Joana Mallwitz, dirección. Piero Piemontesi, piano. Obras de Serguéi Prokoviev, Ludwig van Beethoven, Paul Hindemith y Maurice Ravel. Auditorio Nacional. Madrid, 19 de octubre, 2024.


Orquesta Nacional de España

Joana Mallwitz, directora

Francesco Piemontesi, Piano

Primera parte

Serguéi Prokófiev, Obertura de Guerra y paz, op. 91

Ludwig van Beethoven, Concierto para piano y orquesta núm. 5, en Mi bemol mayor, op. 73,

«Emperador»

Segunda parte

Paul Hindemith, Sinfonía Matías el pintor

Maurice Ravel, La Valse 

Joana Mallwitz (1986) nació en Hildesheim, Baja Sajonia, Alemania y estudió piano y violín en la Hochschule für Musik und Theater de Hannover. Desde 2023 ocupa el cargo de directora titular y artística de la Orquesta Sinfónica de Berlin. Anteriormente fue directora general de música del Teatro de Erfurt y del Teatro estatal de Núremberg. A la edad de 27 años se convirtió en la directora general de música más joven de Europa en ese momento. En 2023 fue reconocida con la Orden al Mérito de la República Federal de Alemania.

Fue alumna de Christa-Maria Hartmann y Karl-Heinz Kämmerling. Continuó sus estudios musicales en el Instituto de Música, Teatro y Medios de Hannover, donde estudió dirección de orquesta con Martin Brauss y Eiji Ōue y piano con Kämmerling y Bernd Goetzke.

En agosto de 2020, cien años después de la fundación del Festival de Salzburgo, Mallwitz se convierte en la primera mujer a la que se le confía la dirección musical de la ópera Così fan tutte. Mallwitz tiene firmado un contrato con Deutsche Grammophon en exclusiva y lanza su primer disco The  Kurt Weill Album en agosto de 2024. Anteriormente había grabado con esta misma compañía un DVD para  la producción del Festival de Salzburgo 2020 de Così fan tutte.

El documental Joanna Mallwitz – Momentum, dirigido por Günter Atteln narra los dos años anteriores a su llegada a Berlín, una fase decisiva de su carrera internacional, con debuts en Múnich, París, Salzburgo y Ámsterdam. Y una película muestra la trastienda de su trabajo y su vida personal junto a su marido, el tenor Simon Bode (miembro del conjunto de la Ópera de Frankfurt),y el hijo de ambos que nació en 2021. En 2023 fue reconocida con la Orden al Mérito de la República Federal de Alemania.​


Por su parte, el otro joven artista, Francesco Piemontesi nació en Locarno en 1983 y es un pianista suizo que reside actualmente en Berlín. Ha dado conciertos en muchos países europeos, en Asia y en Estados Unidos, y ha sido invitado a eventos internacionales como los festivales BBC Proms, Edinburgh International Festival, Lucerne Festival, Festival de Aix-en-Provence y La Roque d’Anthéron. Ha actuado como solista con la London Philharmonic, la BBC Symphony, la City of Birmingham Symphony, la Orquesta Cleveland, la Orchestre Philharmonique de Radio France, la NHK Symphony y la Orchestre de la Suisse Romande, bajo la batuta de directores como Zubin Mehta, Roger Norrington, Charles Dutoit, Jiří Bělohlávek, Stanisław Skrowaczewski, Vladimir Ashkenazy, Ton Koopman, Sakari Oramo y David Afkham.

En lo que se refiere al Sinfónico 04, y como explican los párrafos de la información del Auditorio, “Solo el arte es capaz de destilar belleza a partir de los escombros: los antaño escandalosos autores de las blasfemas Sancta Susanna y El ángel de fuego abrazaron de nuevo la tradición al encarar la composición de Matías el pintor y Guerra y paz, óperas de ambientación bélica que nacieron como reacción al horror nazi. El sinuoso vals de Andrei y Natasha de esta última ópera conecta con el poema coreográfico La Valse de Maurice Ravel, «un torbellino fantástico y fatal» concebido por su autor durante Primera Guerra Mundial que, en origen, iba a ser un homenaje al vals vienés, pero acabó convirtiéndose en una alegoría de la autodestrucción de la civilización occidental.

El concierto «Emperador», por su parte, oculta tras una majestuosa fachada sus propias heridas de guerra: compuesto en 1809 durante la ocupación de Viena, no solo es el último de los conciertos beethovenianos, sino también el único que su autor no pudo estrenar, impedido por su avanzado deterioro auditivo, acrecentado por el estruendo de los bombardeos”.

Guerra y paz (título original en ruso, Война и мир, Voiná i mir, Op. 91) es una ópera en dos partes (un prólogo y trece escenas), a veces arreglada para cinco actos, con música de Serguéi Prokófiev y libreto en ruso del propio compositor y Mira Mendelson, basándose en la novela del mismo nombre de León Tolstói.

La primera intervención de la ONE dejó escuchar una formación ajustadísima, con un sonido limpio, trasparente, en una obertura que dio la pauta de lo que sería el resto de la velada.

El concierto Emperador de Beethoven fue un éxito completo. Elegante, solar, perfeccionista la técnica, la relajación, el uso del pedal que redondeó en una versión brillante, talentosa, de una partitura de entre las más difíciles concebida para el piano romántico. Risueño, con rasgos casi adolescentes, Piero Piemontesi ofreció un modelo de ejecución e interpretación (dos conceptos diferentes) y demostró una especular compenetración con la labor de la directora, siempre siguiéndose mutuamente en las evoluciones del instrumento y la orquesta, que lucía segura, relajada y disponible. Hubo, entre ovaciones, un encore también del repertorio romántico pianístico, que cambió el domingo siguiente, por una pieza de Johann Sebastian Bach.

Joana Mallwitz es un caso aparte: seductora, toda de negro, corte de pelo “Bob”, maquillada con detalle, pantalón de moda tipo “pescador”, debe practicar barra clásica, porque tiene una forma física inigualable: espalda recta, no se agota, mueve los brazos como una sirena, cada uno marcando diferentes intenciones, manos de hada que no descansan, hace muchos gestos con el rostro y logra de esta manera una profunda implicación en su trabajo como directora y un canal abierto con la orquesta que fluye constantemente para destilar calidad y emociones. No embrida a la orquesta, que también, sino que la seduce. No podría haberse disfrutado de algo mejor, porque el clima era un perfume dulce e intenso de sensualidad cubierta/descubierta.

Con una segunda parte menos efervescente pero igual de exigente, la velada se cerró con la insistencia contra los totalitarismos, en favor de la libertad apenas dibujado (Hindemith). Música “degenerada” la suya para el III Reich y considerado un disidente (su mejor era judía y muchos de sus amigos también), fue un artista perseguido y complejo. Los Nazis fueron un conflicto permanente en ese periodo de su vida. Finalmente pasó a Suiza y luego a Estados Unidos.

La valse de Ravel (se escucha poco el seductor Bolero por considerarse vulgar por lo repetido y conocido seguramente es una evidente reconstrucción del típico baile (el vals) que simbolizó la despreocupación del Imperio Austrohúngaro de Francisco José y Sissi ya en su primeros estertores, que acabarán definitivamente en el reparto de los imperios al final de la Gran Guerra (1914-1918). Compuesto entre 1919 y 1920, dedicado a su amiga Misia Sert, nacida Godebska. La obra fue estrenada públicamente el 12 de diciembre de 1920, interpretada por los Concerts Lamoureux dirigidos por Camille Chevillard.

De acuerdo con Serguéi Diáguilev, Ravel intentaba desde 1906 componer para el ballet una Apoteosis del vals en homenaje a Johann Strauss, cosa que la Primera Guerra Mundial le impidió realizar. La experiencia de la guerra vivida como un aniquilamiento de la civilización cambió su perspectiva de la obra que tenía en mente. A la imagen romántica y fastuosa de la corte vienesa del siglo XIX, bien ilustrada por los valses de Strauss, la sucedió la imagen de un mundo decadente amenazado siempre por la barbarie.

El músico compuso, según su propia definición, «un torbellino fantástico y fatal», suntuosa evocación de la grandeza, de la decadencia y de la destrucción de la civilización occidental.”

Concierto reflexivo, serio, sin embargo sembró una corriente de bienestar y disfrute que recorrió toda la velada como un aire benéfico la sala del Auditorio, grande y con excelente acústica. El aforo, completo, y los aplausos, merecidos y generosos. Todos los protagonistas (y esto es importante y hay que señalarlo), parecían felices, exultantes.

Alicia Perris

jueves, 17 de octubre de 2024

CAIXAFORUM MADRID REVIVE EL FLORECIMIENTO CULTURAL DE LA REPÚBLICA DE WEIMAR: IMPRESCINDIBLE

Notas de paso:

Caixaforum Madrid dio un giro copernicano con esta propuesta estrenada el 16 de octubre en su compromiso con la excelencia. Cambia el panorama de las muestras, su compromiso, adaptándose como un guante al conflictivo escenario internacional diplomático, político y sobre todo bélico, que se aprecia en el panorama internacional. 

Se han dado pasos de gigante en muy poco tiempo hacia la destrucción planetaria en todos sus aspectos, ahora en los más concretos: las guerras nucleares, sin olvidar la carnicería del cuerpo a cuerpo medieval o del siglo XIX y anteriores. Han caído el respeto hacia la ONU y las grandes organizaciones siempre tenidas en cuenta, el derecho internacional y humanitario y los que no combatimos, porque creemos en otras versiones de la resolución de conflictos, deberíamos ponernos a pensar qué nos ha pasado. Como individuos, como sociedades, como especie.

Vinculada estrechamente a estas reflexiones, la exposición que acaba de inaugurarse en Caixaforum madrid es todo un desafío. Se abandonan los planteamientos más lúdicos y entretenidos, "para todos los públicos", para llamar a un momento muy largo de contemplación preparado diacrónica e históricamente en una onda temporal en la que viajamos con los acontecimientos. 

Con delicadeza, con una levedad aparente muy seria en el tratamiento de la información, de las imágenes, de todos los participantes de esta gran epopeya (creadores especialmente de todos los ámbitos artísticos) (¿fallida?) que arranca a finales del XIX con Bismarck y termina hoy mismo, pasando anteriormente por el Nazismo, sus orígenes y sus consecuencias.

 NO SE LA PIERDAN Y A REVISAR EN VARIAS OCASIONES, ESTÁ LLENA DE DETALLES.

Alicia Perris

LA EXPOSICIÓN DE LA REPÚBLICA DE WEIMAR Y SU CONSTELACIÓN DE ACONTECIMIENTOS

La exposición Tiempos inciertos. Alemania entre guerras revive el florecimiento cultural, creativo e intelectual de la República de Weimar, etapa marcada por la incertidumbre y la inestabilidad, pero también sinónimo de creación y progreso con influencias que llegan hasta hoy.

La directora de CaixaForum Madrid, Isabel Fuentes, y el arquitecto y filósofo Pau Pedragosa, uno de los comisarios de la muestra, han presentado este miércoles la exposición Tiempos inciertos.

 Alemania entre guerras, una visión transversal del rico periodo de entreguerras centrada en la etapa que va de 1918 a 1933. La muestra recrea el amplio universo de la República de Weimar, un capítulo fundamental de la historia europea y mundial que ha trascendido como referente de cambio.



La exposición destaca por su mirada poliédrica y por la pluralidad de lenguajes museográficos que se ocupa de apelar a los sentidos de los visitantes para trasladarlos al universo de la República de Weimar. 

Lo hace a través de la escenografía, la música, el lenguaje audiovisual y la participación, además de mostrar también cerca de 90 obras junto a las piezas audiovisuales y musicales.

Otto Dix, Hugo Erfurth con perro, 1926.© Museo Nacional Thyssen-Bornemisza. Madrid

Para este montaje se ha contado con la colaboración del Museo Nacional Thyssen-Bornemisza, el Museo Nacional de Artes Decorativas y el Institut Valencia d’Art Modern, que han prestado obras singulares del arte alemán de entreguerras, así como de instituciones alemanas como el StadtsMuseum Berlin, el Käthe-Kollwitz Museum de Colonia y el Georg Kolbe Museum de Berlín.

George Grosz, Escena callejera, 1925.© Museo Nacional Thyssen-Bornemisza. Madrid

Con la República de Weimar, Alemania se convirtió en epicentro de la vanguardia, la experimentación y los cambios, y marcó un hito cultural en campos como la literatura, el cine, el arte, el teatro, la arquitectura y el diseño a través de numerosos artistas, entre ellos Thomas Mann, Fritz Lang, Otto Dix y Bertolt Brecht, así como de la Escuela de la Bauhaus, que contaba con profesores como Paul Klee y Vasili Kandinski, entre otros.

Con este recorrido de tipo temático, los visitantes emprenderán un viaje en tres tiempos que los llevará del mundo de ayer a una nueva Alemania: la República de Weimar y a un presente incierto.

El mundo de ayer

Una nueva Alemania: la República de Weimar

Un presente incierto

El primer gran ámbito sitúa al público en los tiempos previos a la Primera Guerra Mundial en un salón burgués inspirado en la novela Los Buddenbrook, de Thomas Mann.

El segundo explora las tensiones internas y los cuestionamientos de las viejas certezas que se dieron durante la República de Weimar: la representación del cuerpo humano; el individuo y el fenómeno de las masas; los dorados años 20 y las crisis económicas; los nuevos roles de género; la unión de arte y técnica en la Bauhaus; la innovación y la diversidad musical de esos años; la incertidumbre como principio de la ciencia; el descrédito de la razón en la filosofía, y el fin del sueño democrático. El último ámbito propone una reflexión, un siglo después, sobre las incertidumbres de ese periodo y el modo en que reverberan hasta nuestro mundo de hoy.


República de Weimar: una propuesta renovadora basada en la razón, la democracia y la igualdad

Tras el terremoto político e ideológico que supusieron la Gran Guerra y la caída de los cuatro grandes imperios, el austrohúngaro, el alemán, el otomano y el ruso, la República de Weimar (1919-1933) surgió como una propuesta renovadora basada en la razón, la democracia y la igualdad que permitió por primera vez el sufragio femenino.

Christian Schad, Retrato del Dr. Haustein, 1928.© Museo Nacional Thyssen-Bornemisza. Madrid

Pese a su corta duración (14 años) y el posterior ascenso del Partido Nacionalsocialista de Hitler, la enorme creatividad del período de entreguerras dejó una profunda huella como referente de cambio hacia una nueva época. La exposición propone, con diferentes capas de profundidad, comprender este período con sus contradicciones, sus virtudes y sus defectos para entendernos mejor a nosotros mismos y también para construir el mundo de mañana.

La muestra aborda, por tanto, conceptos clave como el cambio, la incertidumbre, las oportunidades, la innovación, el legado y la reflexión, y aborda estos temas:

La República de Weimar, transición entre el viejo mundo de las certezas y un tiempo incierto que sigue caracterizando también nuestro presente.

La República de Weimar como referente histórico de una explosión de creatividad artística, de pensamiento y de progreso social.

Las incertidumbres y las nuevas posibilidades que redefinen todos los campos del saber, desde el arte hasta la ciencia.

Weimar como tiempo en el que se realizan los ideales ilustrados de la libertad, la democracia y la igualdad en tensión con los del autoritarismo, la disciplina y el orden.

Las potencialidades y fragilidades de la democracia.

Momento de ruptura con la modernidad e inicio de la posmodernidad.


Bienvenidos a El mundo de ayer

Al inicio de la exposición, los visitantes accederán a una recreación escenográfica de un salón burgués de finales del siglo XIX que representa el mundo estable y previsible que se acaba con el estallido de la Primera Guerra Mundial.

Este ámbito se sumerge en la realidad y los valores de la alta burguesía europea, así como en el colapso del viejo orden imperial. En lo sonoro, el alegre y tradicional vals El Danubio Azul (1867), de Johann Strauss, simboliza la armonía de la vieja Europa, mientras que la Consagración de la Primavera, de Igor Stravinsky (1913), una de las obras fundacionales de la vanguardia musical del siglo XX, representa la pulsión de ruptura artística con ese orden y es a la vez una anticipación de la ruptura real dentro de Europa que será la Gran Guerra.



«La época de antes de la Primera Guerra Mundial fue la edad de oro de la seguridad. Todo en nuestra monarquía austríaca casi milenaria parecía asentarse sobre el fundamento de la duración y el propio Estado parecía la garantía suprema de estabilidad.  Todo lo radical y violento parecía imposible en aquella era de la razón».

                                                                            Stefan Sweig, El mundo de ayer

Posteriormente, los visitantes se desplazarán por un espacio de transición escenográfico entre El mundo de ayer y la República de Weimar. Se trata de un pasillo estrecho y laberíntico, inspirado en una trinchera de la Primera Guerra Mundial, con una ambientación oscura e inquietante, y con efectos de sonido. Grandes cifras relativas a la Primera Guerra Mundial aparecen proyectadas en las paredes.

Una nueva Alemania: la República de Weimar

El segundo ámbito, el centro de la muestra, comienza ofreciendo a los visitantes el contexto de la fundación de la República de Weimar en la ciudad del dramaturgo, escritor, filósofo y naturalista Johann Wolfgang von Goethe y del escritor, filósofo e historiador Friedrich Schiller como símbolo de la voluntad de construir una nueva Alemania humanista e ilustrada.

Imágenes, documentos y textos dispuestos cronológicamente permitirán efectuar un recorrido por los hechos políticos más relevantes de la historia de la República, desde la Revolución de Noviembre de 1918 hasta la elección de Hitler en 1933.

Este espacio central de la exposición se divide en los siguientes subámbitos:


Cuerpos en cuestión

El individuo y la masa

Años dorados y tiempos oscuros

Nuevos roles de género

Arte y técnica

Paisaje sonoro

La incertidumbre como principio (ciencia)

La crisis de la razón (filosofía)

 El fin del sueño democrático


Timeline de los principales hitos históricos y culturales relacionados con la República de Weimar.© Fundación "la Caixa"

Un presente incierto, los ecos de la República de Weimar en la actualidad

Muchas de las tensiones e ideas surgidas durante la República de Weimar resuenan todavía en nuestro mundo de hoy. En un primer espacio y a través de un vídeo, personajes públicos contemporáneos como la filósofa Begoña Román; la reportera internacional Patricia Simón; el sociólogo Miquel Missé; la escritora y poeta Sara Torres; la comisaria del Sónar+D, Antònia Folguera, y el físico y fundador de Quantum Fracture, José Luis Crespo, ofrecen su visión desde el presente de las oportunidades y los malestares del mundo actual.

En un segundo y último espacio, quienes se acerquen a visitar la exposición tendrán la oportunidad de participar y opinar en un juego de preguntas concretas de distintas disciplinas sobre nuestros tiempos inciertos. A través de la visualización de las respuestas, el recorrido acaba con contenidos dinámicos y cambiantes que reflejarán la variedad de opiniones del público.

Con motivo del estreno de esta exposición de producción propia e impulsada por la Fundación ”la Caixa”, la plataforma online gratuita CaixaForum+ lanza el pódcast Conversaciones sobre Weimar a partir de una idea y una producción de Letras Libres.


https://mediahub.fundacionlacaixa.org/es/

martes, 15 de octubre de 2024

LES RENCONTRES PHILOSOPHQUES DE MONACO: FRANÇOIS NOUDELMANN. DACHAU, DEPORTADOS ESPAÑOLES, 80 AÑOS

 

François Noudelmann, qui enseigne dans les universités américaines depuis vingt-cinq ans, est frappé par la nouvelle pratique du mensonge en politique, et en particulier depuis l’élection de Donald Trump en 2016. Les contre-vérités sont diffusées comme des « faits alternatifs » : à chacun son interprétation. Nous serions entrés dans l’ère de la post-vérité, porte ouverte aux fake news et aux manipulations les plus grossières. 

Le but de cet essai est de retracer le chemin qui a mené à ce relativisme depuis une quarantaine d’années : le règne du storytelling, l’empire de l’émotion, la politique des identités, l’idéologie victimaire, la cancel culture, la déconstruction philosophique, l’autofiction et l’exofiction, la virtualisation du monde par l’intelligence artificielle… ont démoli la raison occidentale.

Pour sauver la vérité et la positivité des faits, François Noudelmann explore dans cet essai d’autres voies particulièrement instructives et novatrices, comme l’indignation devant le mensonge ainsi que l’alliance du doute et de la révolte, qui permettent de croire encore à un langage commun.

Max Milo - ISBN : 9782415003937


Y TAMBIÉN


@AmicalDachau

Miembro del CID (Comité Internacional de Dachau), representación de los deportados españoles en el Campo de concentración nazi de Dachau. Contra el olvido.

ASOCIACIÓN AMICAL DACHAU (AAD) 

La Asociación Amical Dachau (AAD), ha sido creada para dar identidad a todos los españoles que fueron deportados al campo de concentración de Dachau (Múnich), con el deseo de recoger la semilla que colocaron un grupo de prisioneros cuando se unieron antes de la liberación del Campo de concentración de Dachau que se llevó a cabo el 29 de abril de 1945, en lo que llamaron la Comisión Internacional de Prisioneros.

Uno de sus miembros fue el médico español Vicente Parra cuyo trabajo y dedicación para proporcionar bienestar a sus compañeros fue constante. Su compromiso ha sido un legado y una herencia para las siguientes generaciones que ha estado durante muchas décadas sin darle forma sumergida en un silencio y casi en un olvido.

Nos dejó el mensaje que era un deber mantener viva la memoria de todos los deportados al campo de Dachau y sus subcampos, y en particular hacer visibles la de todos los españoles que llegaron a un territorio donde el aniquilamiento del ser humano era su principal objetivo.

Los deportados españoles:

La situación de estos deportados españoles fue un poco diferente de la del resto de ciudadanos que provenían de otros países de Europa. Los españoles ya habían sufrido una contienda provocada por una sublevación militar apoyada por Hitler y Mussolini que conllevó una guerra nacional.

Podríamos decir que la mentalidad nazi/fascista no ve la luz en la segunda guerra mundial, si no que surge con fuerza en la España de 1936 con el golpe militar del general Mola y Francisco Franco, entre otros. Este hecho provoca el éxodo de la población civil y de algunos militares hacia la frontera Francesa, allí les esperan los campos franceses, después el gobierno de Vichy y la invasión de Hitler en Europa que les lleva a los campos de concentración.

Así pues los españoles son tres veces deportados y maltratados, para muchos Dachau fue su destino final, para otros una experiencia que marcó sus vidas y la de sus familias para siempre.

La Asociación Amical Dachau-AAD además de otorgar a los deportados españoles el lugar que la historia les debe, quiere agradecer al Comité Internacional de Dachau haber sido admitida como miembro de dicho Comité el pasado 4 de mayo de 2019, otorgando a las víctimas españoles el reconocimiento que Europa les otorga. Es a la vez una fecha muy significativa pues se encuentra dentro del 80 aniversario del final de la guerra de España que sucedió el 1 de abril de 1939, y cercana al 75 aniversario de la liberación del campo de Dachau el 29 de abril de 1945.

Leer más: http://www.amicaldachau.org/