LUIS MARTINEZ
El director británico recibe el premio Master of Cinema en la
décima edición del Festival de Cine Atlántida que se celebra en Palma de
Mallorca y en Filmin
El director Stephen
Frears. Laura Lezza/Getty Images
Stephen Frears (Leicester, 1941) es uno de los británicos que ya no
vendrá por culpa de la cuarentena que ha impuesto su gobierno a todo aquel que
aterrice en el Reino Unido procedente de la España de los rebrotes. Tanto que
nos quejábamos de las borracheras absurdas de sus compatriotas y ahora resulta
que sus meados de madrugada en la piscina del hotel eran nuestro particular
maná.
Sea como sea, el premio Master of Cinema que le entrega con todos
los honores el 10º Festival de cine Atlántida que se celebra en Palma de
Malllorca y en Filmin, presencial y 'online' a la vez, es suyo. Nos atiende vía
zoom poco antes de la cancelación del viaje.
Autor entre otras de Mi hermosa lavandería (1985), Ábrete de orejas
(1987), Las amistades peligrosas (1988), Alta fidelidad (2000), The Queen
(2006) y Philomena (2013), Frears se mantiene fiel a sí mismo. No es que le
moleste ser entrevistado, simplemente le hace gracia. Ni una respuesta más
larga de una frase ni una divagación ni una pregunta sin repregunta. Adorable.
Y divertido. Frears se niega a ver en su trabajo más que sencillamente eso:
trabajo. Desprecia las etiquetas, le cuesta reconocerse dentro de generación
alguna y sólo entiende el cine como oficio.
Sin embargo, si se le presiona y si se le recuerda que el año
pasado fue Ken Loach el que recibió este mismo premio puede que hasta se rinda
(un poco solo) y acabe por aceptar que allá en los 80, el cine británico vivió
su particular momento de gloria. "Gran Bretaña había cambiado tanto tras
la guerra que el país nunca volvió a ser el mismo. Cambió la educación, la
clase trabajadora se incorporó a ella, y nosotros nos beneficiamos de ello. Y
esa sociedad nueva era un tema muy interesante", recuerda.
El premio que recibe se llama 'Master of Cinema'...
(Se ríe) Es un título vistoso...
... sin embargo, sus últimos tres trabajos desde 'Victoria y Abdul'
(2017) han sido para la televisión, ¿no sería más corrrecto 'Master of Cinema
and Televisión'?
Sí, es cierto. Pero no ha sido buscado. Rara vez busco ya nada.
Simplemente, lo que me han ofrecido para hacer en televisión ha sido mucho más
interesante que lo que me han ofrecido para el cine. El año que viene haré una
película, 'Thelast king'.
Tengo la impresión de que vive una especie de regreso al origen.
Empezó en la BBC y ahora ha encadenado tres series como 'A very english
scandal', 'State of the Union' y 'Quiz' (que estrenara Mvistar en
septiembre)...
Nunca he tenido preferencias. He alternado el cine y la televisión
dependiendo únicamente del material. Cuando me bautizaron, el hada buena me dio
dos talentos: el de elegir actores y el de escoger guiones. Si me ciño a estas
dos habilidades, bien (vuelve a reír).
¿Cuánto ha cambiado la televisión desde que empezara allá en los 70
y ahora con el 'boom' de las plataformas?
Sinceramente, creo que el principal cambio he sido yo. Era un
chaval cuando empecé y me temo que he dejado de serlo. No sé si la televisión
es diferente. Pero yo sí. Siempre me dicen: "Antes hacías películas
iconoclastas y eso se ha perdido". Yo, sin embargo, no he sentido el
cambio en ningún momento. No puedo seguir haciendo películas sobre gente joven
puesto que no tengo nada que ver con ellos.
La serie 'Quiz', su último trabajo, trata del hombre que hizo
trampas en el programa 'Quiere usted ser millonario'. ¿Cree que vivimos un
tiempo perfecto para los tramposos?
Sin duda. Basta ver al rey de los tramposos, Donald Trump, que en
vez de estar en la cárcel está presidiendo el país más poderoso del mundo.
Esto me recuerda que usted firmó un manifiesto de apoyo a Jeremy
Corbyn en las últimas elecciones que ganó Boris Johnson...
Sí, no creo que fuera algo muy sensato por mi parte. El Partido Laborista
es mejor ahora que antes.
¿Qué opinión le merece lo que está ocurriendo ahora mismo en Europa
en general y en el Reino Unido en particular después del Brexit?
Es terrible. La pandemia es terrible y sus consecuencias en mi país
son ahora mucho más graves a consecuencia del Brexit. El Brexit fue una gran
estupidez. Una decisión equivocada y manipulada por los partidos de derecha.
¿Cómo ha vivido el confinamiento?
En Londres en compañía de mi familia, mis hijos, mis amigos... La
compañía ha sido un bálsamo contra la enorme frustración que genera una
situación como la que estamos viviendo.
¿Cómo cree que saldrá el cine de esta crisis?
No tengo ni idea. Pero me temo que será una catástrofe para el cine
europeo, el cine independiente americano y, en general, para el cine que hace
gente como yo. Estamos amenazados sin duda. Es ahora cuando caigo en la cuenta
de lo afortunado que he sido de poder haber hecho las películas que he hecho en
mi vida. Muchas de ellas ahora no se podrían hacer.
Pienso, ya que habla de sus trabajos de juventud, en sus primeras
películas como 'Mi bella lavandería' o 'Ábrete de orejas' y pienso también en
'A very english scandal', una de sus últimas series. Uno de las argumentos que
une a las tres es la reivindicación libre, por así decirlo, de la
homosexualidad. Entre las primeras y la última median décadas. ¿Quiere esto
decir que seguimos aferrados a los mismos prejuicios y que no hemos avanzado?
Es difícil responder a la pregunta. En mi país la idea de
democracia ha sido gravemente erosionada en los últimos años. Se ha atacado a
las libertades de manera sistemática. En lo que refiera a la homosexualidad,
tengo que reconocer que no entiendo muy bien la guerra actual de géneros. En mi
juventud, habia una necesidad de cambiar la ley que penaba a la homosexualidad.
Y se cambió. Ahora me pierdo entre tanta confusión.
También participa como uno de los directores de 'La voz más alta',
sobre la creación de Fox News...
Sí, creo que es importante reflexionar sobre lo que nos está
sucediendo. La manipulación de la información ha hecho que, por ejemplo, en el
Reino Unido la extrema derecha esté creciendo de forma muy preocupante. Y eso
está pasando en toda Europa.
¿Se imaginaba en los 70, en plena euforia creativa y progresista,
que estaríamos ahora donde estamos?
Para un viejo liberal como yo es muy frustrante todo lo que sucede.
La buena noticia es que Trump parece que tiene los días contados. Quizá en
noviembre todo cambie. Desgraciadamente, lo que sucede en Estados Unidos
influye decisivamente en el resto del mundo. El mundo será mejor sin él.
El que recibe es un premio a
toda su filmografía y es muy difícil encontrar una definición corta para su
trabajo. Se me ocurre que quizá una posible sea el sentido del humor, su ácido
sentido del humor hasta en la más trágica de las situaciones...
Me gusta. Me gusta hacer bromas, pero soy muy serio a la vez. Pero
sinceramente nunca pienso en mí mismo como un artista o un creador. No soy
alguien como Pedro Almodóvar, por ejemplo. Él es un verdadero artista. Me
considero a mi mismo como un artesano, como un director en el sentido del cine
clásico americano.
¿Qué le interesa del trabajo de Pedro Almodóvar?
Él es un auténtico creador.
Si vuelve la vista atrás, ¿cuántas obras maestras reconoce en su
filmografía?
Ninguna (rompe a reír).
Si me permite, le cito alguna...
Me conformo con reconocer siete u ocho películas que la gente
adora. Pero no hablaría de obras maestras en absoluto.
¿A cuáles se refiere?
Creo que 'Amistades peligrosas' es un película maravillosa. 'Mi
bella lavandería', Philomena', 'The Queen', 'Los timadores'...
¿Qué aprendió de su paso por Hollywood?
Fue muy interesante, era como hacer películas en un circo. Aprendí
muchas cosas. Desde la importancia de los actores al papel que desempeña el
éxito. Pero también me di cuenta de lo fundamental para mí que es la
independencia. Y eso me hizo volver. Si de algo me arrepiento es de haberme
engañado a mí mismo. Pensé que podría hacer las películas que quería dentro de
esa maquinaria y que, además, serían un éxito. En cualqueir caso, es una
maquinaria muy inteligente y son muy buenos en su trabajo.
Ha mencionado 'The Queen' y me atrevo a preguntarle por lo que
piensa de la monarquía "un viejo liberal" como usted.
Bueno, me llama la atención el repentino interés que todo el mundo
tiene por la monarquía. Mire la serie 'The crown'. Cuando yo hice 'The Queen' a
nadie le interesaba el asunto lo más mínimo. Es curioso.
¿Qué papel cree que juega la monarquía hoy? Ahora mismo hay algo
parecido a una polémica en España...
Sí, el padre de su rey es un estafador... Es completamente ridículo
juntar las ideas de democracia y monarquía. Por otro lado, hay que reconocerlo,
la Reina es una mujer extraordinaria. Me quito el sombrero. De alguna manera,
nos recuerda a nuestras madres (se ríe). No sé que sucederá cuando muera. Me
aterroriza pensarlo.
¿Qué cree pasará cuando muera?
Ni idea. Siempre me he considerado republicano. Prefiero ser un
ciudadano a un súbdito.
https://www.elmundo.es/cultura/cine/2020/07/28/5f1eae8321efa01e3d8b4572.html
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