La nieta del dictador ha pagado las últimas tasas que la acreditan,
además, como Grande de España
Carmen Martínez-Bordiú, en junio de 2017 en Madrid. GTRESONLINE
Carmen Martínez-Bordiú, nieta mayor del dictador Francisco Franco,
ya es duquesa de Franco con Grandeza de España. La hija mayor de Carmen Franco
y Cristóbal Martínez-Bordiú ha cumplido los últimos trámites que le faltaban
para hacerse con un título que perseguía desde la muerte de su madre, a finales
de diciembre de 2017.
El Boletín Oficial del Estado ya anunció hace un año que
Martínez-Bordiú, de 68 años, había logrado confirmarse como heredera del ducado
de Franco, un título que había creado el rey Juan Carlos para Carmen Franco
Polo en noviembre de 1975 por sus "excepcionales circunstancias y merecimientos".
A 31 de mayo de 2018 el anterior ministro de Justicia, Rafael Catalá, firmaba
que se mandara "expedir [...] la Real Carta de Sucesión en el título de
Duque de Franco, con Grandeza de España, a favor de doña María del Carmen
Martínez-Bordiú Franco". [...] Sin embargo, faltaba la carta en sí y la
firma en aella de la actual ministra, Dolores Delgado.
Ahora Martínez-Bordiú ya es duquesa y tiene su carta firmada. En su
caso, no ha tenido que cumplir con los alrededor de 2.600 euros del impuesto de
sucesiones ya que esta es la primera vez que ese título se hereda y, por tanto,
su transmisión está exenta de pagos. Si ese ducado llega a pasar a su hijo,
Luis Alfonso de Borbón, él ya sí que tendría que hacer frente al pago del mismo
al ser la tercera generación. Así, Carmen Martínez-Bordiú ya ha recibido la
carta que la acredita como duquesa. Lo ha confirmado ella misma a EL PAÍS a
través de su abogada, Teresa Bueyes. "Ya es duquesa. Está todo pagado y
todo en orden", ha explicado la letrada. Por su parte, el Ministerio de
Justicia no ha querido aportar ningún dato al tratarse de un expediente privado
que atañe a una persona en particular.
La obtención de ese ducado era un antiguo anhelo de la primogénita
de los marqueses de Villaverde. Ella misma solicitó al Ministerio de Justicia,
en marzo de 2018, obtener ese título, tal y como se publicó en la sección de
anuncios oficiales del BOE a finales de marzo de 2018. Desde el año 2006,
cuando la llamada Ley de Igualdad para la Sucesión de Títulos Nobiliarios acabó
con la prevalencia del varón sobre la mujer, ella era la heredera legal tanto
del ducado de Franco como del señorío de Meirás. Sin embargo, su abuela, Carmen
Polo, quería que ese segundo título fuera a parar a Francis Franco, el tercero
de los hermanos y primero de los varones, pese a que el título era, en
principio, vitalicio de la viuda de Franco y se extinguía con su fallecimiento.
Cuando Carmen Polo murió, él lo reclamó y lo heredó. Además, Francis también es
marqués de Villaverde desde 1998, cuando murió su padre.
Desde el fallecimiento de la única hija del dictador, su
primogénita Bordiú ha mantenido un perfil bajo, sobre todo en comparación con
su habitual movimiento mediático. Apenas ha dado declaraciones desde entonces
y, de hecho, ha abandonado España para irse a vivir a Nazaré, en Portugal,
junto a su pareja, el australiano, Timothy McKeague. Poco más se sabe de ella
en estos meses, además de que ella y sus hermanos han decidido sacar a la venta
el antiguo domicilio familiar de la calle Hermanos Bécquer, así como la finca
asturiana llamada La Piniella, de 30 hectáreas y con un precio de casi cinco
millones de euros.
Cuando murió su madre, tanto Carmen como sus hermanos decidieron
bajar su actividad mediática y establecer una especie de pacto de silencio
mientras se resolvieran las cuestiones del ducado y de la herencia, que se
estima en entre 500 y 600 millones de euros. Además, el pasado septiembre se
supo que tenía que pagar 525.063,96 euros a la Agencia Tributaria. Una deuda
que ella afirmaba que no se debía a una sanción, sino a un recurso que había
perdido tras la venta de unas acciones en 2006 y la posterior compra de unas
propiedades, por las que había habido un error en su declaración de la renta.
Sí admitió entonces que hubo "controversia administrativa".
Los hermanos Franco tratan de mantener su silencio con las
distintas polémicas que les rodean, entre ellas la exhumación del dictador del
Valle de los Caídos, paralizada a primeros de junio por el Tribunal Supremo.
Ahora el Gobierno también ha sacado a relucir que la venta del pazo de Meirás,
propiedad de la familia desde los años cuarenta, fue fraudulenta.
FE DE ERRORES
Una primera versión de este artículo afirmaba que Carmen
Martínez-Bordiú había tenido que pagar un impuesto para recibir su título. Sin
embargo, la ya duquesa de Franco está exenta de dicho pago al ser la primera
transmisión del ducado desde su creación.
https://elpais.com/elpais/2019/07/22/gente/1563789697_159262.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario