El país de Mozart y Strauss es uno de los secretos a voces del nuevo pop
europeo. Descubre 9 bandas que pueden poner a Austria en el mapa
Austria ha sido uno de los países más ricos del
mundo durante décadas. Sin embargo, en Austria no sabían rockear. Ay. ¿Que si
estaban ambas variables relacionadas directamente? Bien, eso nadie lo puede
demostrar científicamente, pero ya es lo de menos, pues la tendencia ha
cambiado de un modo radical en los últimos cinco años. No es que
Austria haya dejado de ser uno de los estados más ricos del mundo, sino que
ahora la tierra de Mozart, Strauss y Sissi Emperatriz experimenta además una
increíble explosión musical, con cientos de grupos que amenazan con
extenderse por Europa, como demuestra su elección como país invitado en el
último festival Eurosonic, una de las ferias más importantes de la música en
directo en el Viejo Continente, equivalente aquí del South By Southwest
americano. Hurgando en el underground austriaco actual,
principalmente el de Viena, epicentro de todo lo que pasa en este pequeño país
alpino de 8,5 millones de habitantes, hemos seleccionado algunos de los grupos
más en boga de esta joven y bulliciosa escena.
Klangkarussell. En un año tan orientado a la electrónica de
baile como 2014, es casi obligado empezar por este joven dúo que ha alcanzado
un éxito internacional enorme gracias a un pepinazo extendido por las
macrodiscotecas de media Europa, Sonnentanz. Los dos DJs proceden
de Salzburgo y han sido fichados por Universal, que publicará su primer álbum
en breve. Grupo fetén de festival.
Ja, Panik. La cenicienta de la nueva escena indie de
Viena es este quinteto adorado por la muchachada de allí, que ha roto bastantes
estereotipos. Si tradicionalmente los grupos austriacos tenían serios problemas
para exportar su música, Ja, Panik han roto esa barrera y de hecho se han
mudado a Berlín para desarrollar más su potencial en Europa. Además, cantan en
alemán -idioma oficial en Austria-, que hasta hace poco era apenas usado por
los grupos locales. Acaban de publicar su cuarto álbum, Libertatia.
Soap&Skin. Pianista y cantante con inquietudes
experimentales de 23 añitos, Anja Plaschg nació en una granja y ha crecido en
la muy tranquila ciudad de Graz. Es cantautora en el fondo y su música
transmite cierta quietud decimonónica, aunque aquí y allá aparecen fogonazos
oblicuos que le dan a sus canciones una belleza extraña. Acaba de publicar el
single Sugarbread, cantado en alemán, inglés y latín, chúpate esa.
The Vegetable Orchestra. Una curiosidad: una banda de
excelentes músicos procedentes de la clásica -estudiar piano en Austria es la
extraescolar por antonomasia...- que se han juntado como divertimento para
tocar utilizando única y exclusivamente verduras. Tal cual. La mañana del
concierto van al mercado local, hacen la compra y durante el día van taladrando
zanahorias que se convierten en flautas y así.
Elektro Guzzi. Han actuado en Sónar y Primavera Sound, y la
verdad es que en medio planeta. Qué gran grupo es este trío instrumental de
guitarra, bajo y batería, capaz de improvisar sorprendentemente en directo su
original electro-rock bailable y psicodélico. Ya tiene a punto de caramelo su
próximo álbum, aunque el espacio natural para sus trances no exentos de humor
es sin duda el escenario.
Sex Jams. Animoso grupete con chica deslenguada al frente.
Pasaron su adolescencia escuchando hardcore y punk estadounidense de los años
80, disonante caldo de cultivo que hoy alienta su pop ruidoso. La ética
autogestionada les ha valido de mucho en la escena indie vienesa, que tiene muy
pocos recursos de industria musical (existe un puñado de discográficas indies y
apenas hay mánagers).
Gin Ga. Este cuarteto de corte indie-pop festivo
suena como el típico grupo inglés actual de guitarras y sintetizadores. Están
en el momento de despegue: ya son grandes en su país y con su reciente segundo
álbum, Yes/No, van a intentar darse a conocer en toda Europa. Hay
posibilidades de que vengan a tocar a España también.
Fuckhead. El pop-rock ha experimentado una auténtica
revolución en Austria en sólo 10 años, pero estos bestiajos son de los pocos
pioneros que ya hacían música interesante mucho antes de esta nueva escena,
antes incluso de aquella moda del slowtempo de Kruder & Dorf-meister, en
los 90. Su historia se remonta a 1988 nada menos, con un estilo de techno-rock
industrial arisco, excéntrico y provocador. Sampleados por Scott Walker y
elevados a la insondable categoría de grupo de culto, en su último disco se han
orientado más que nunca a la electrónica, el muy bruto Avoid Nil.
Sohn. En realidad no es austriaco, sino inglés,
pero este productor y cantante reside en Viena desde hace años y forma parte de
la escena local. Fichado por la disquera indie londinense 4AD, publicará en
abril su muy esperado álbum de debut, Tremors. Su pop electrónico
sensible está conquistando adeptos rápidamente, por lo que por una vez y sin
que sirva de precedente el término "secreto a voces" es más que
apropiado.
http://www.metropoli.com/musica/2014/02/21/5305ee72268e3ed6738b4579.html