LUPE CARRASCO
Nathan Fillion ve a Castle "como el Gran Héroe Americano",
protagonista de aquella serie de los años 80 "lanzado a este mundo sin
entender nada". "Es como un
pez fuera del agua", dice al respecto del escritor de novelas
policíacas más conocido de la televisión.
La cadena norteamericana ABC, de momento, le da cobijo. En España, lo hace
Cuatro, que estrenó la pasada
semana la octava temporada de la serie, de la que emite hoy a las 22.30
horas el tercer capítulo -la confianza en los métodos de los personaje es tanta
que el canal de Mediaset programa reposiciones hasta las 02.30-. Las aventuras
de crímenes y de misterio de Rick Castle y Kate Beckett -interpretados por los
actores Nathan Fillion y Stana Katic- han estado presentes en la noche de la
televisión española desde el año 2009. La séptima temporada ha dado mucho de
qué hablar, y es que su último
capítulo dejó a la audiencia con la sensación propia de un final.
Agradecimientos a todos los personajes por parte del protagonista y hasta una
entrega de premios con discurso daban la impresión de que Castle decía
adiós. "Parecía que podría ser el final", afirma Fillion en una
entrevista internacional ofrecida a EL MUNDO. "He aprendido algo en mi
carrera: en Hollywood nada es lo
que parece, no existen las garantías (...) Pensé que iba a tener que
ponerme a buscar un trabajo", confiesa.
Lo que parecía un adiós no era más que otro hasta luego. Para este actor
canadiense (Edmonton, Alberta, 1971), la serie "tiene un motor muy simple
que continúa funcionando" y que ése y no otro es el secreto "para
conseguir que un show permanezca en antena durante mucho tiempo". A su
juicio, la clave estaba en "mantener
al público queriendo algo", pero no resolver todas las cuestiones:
"Si les das lo que piden a la primera, dejarán de quererlo y dejarán de
verte". No obstante, las siete temporadas vividas en la serie le han
llevado a replantearse sus opiniones: "Cuando el público quiere algo, o
nosotros queremos algo, y finalmente lo conseguimos, no dejamos de querer más".
Sobre la nueva temporada no ofrece demasiada información, pero sí aporta
datos sobre uno de los grandes misterios de las tramas, el de la relación de
los protagonistas: "Ellos se separan y Castle no sabe qué pasará con
Beckett". Los fans, en cualquier caso, pueden estar tranquilos: "Hay
un punto en el que sus caminos se cruzan", señala el intérprete, como han
podido comprobar los espectadores del segundo episodio de la temporada, emitido
el pasado martes en Cuatro.
Más evidente incluso que el amor que existe entre los dos protagonistas, es
el del actor por su propio personaje. Al preguntarle sobre cómo le gustaría que
Rick Castle fuese asesinado en la serie, una cuestión que adquiere importancia
por la incertidumbre generada al final de la anterior temporada, el canadiense
bromea: "¿Ser atropellado por un coche?". Después, recuerda cómo
"en la primera saga literaria supimos que Castle acababa con su personaje
[Derrick Storm] con un tiro en la cabeza. Es una excelente idea". Algo
tiene muy claro: si Castle tiene que morir, que sea "para no volver".
Fillion no contempla ceder el testigo: "Si Castle muere, nadie puede tener la capacidad de reemplazarlo. Sólo yo.
Él muere conmigo". Y espanta a los candidatos: "No es una de
James Bond". Tampoco tiene su personaje el equipamiento de ese agente
secreto: "Castle no tiene pistola, no tiene chaleco, no está preparado
(...) Realmente, es el último tipo al que llamaría".
Acerca de su trabajo, Fillion declara que "es diferente cada
día". En las lecturas de guión empiezan las sorpresas: "He disparado
una pistola, he saltado desde un coche en movimiento y, ¡ah!, creo que tendré
una araña en la cabeza". Con humor, disfruta de la tranquilidad de una
entrevista: "¿Cuál es mi acción hoy? ¿Sentarme en esta silla?
Excelente".
Los sobresaltos de las tramas no bastan para atarle al papel. El canadiense
se pone serio para admitir que el final de Castle, tarde o temprano, llegará:
"Todo el mundo quiere tener empleo. Eso ya lo tengo, ahora quiero
variedad, quiero interpretar diferentes papeles (...) Ésta va a ser la vez que
más años he estado haciendo algo. De colegio cambié hasta cuatro veces. No quiero que las cosas se vuelvan habituales".
Que tomen nota los productores: "Estoy
buscando interpretar algo realmente excéntrico".
El primer trabajo que realizó fue en la serie de televisión One
life to live, junto a Bob Woods, al que considera su "mentor". Ese actor, que
estuvo interpretando el mismo papel durante 30 años, le dio un consejo que aún
recuerda Fillion: "No importa cuantas veces tengas que decir una frase,
dila siempre como si fuera la primera".
No obstante, sus admiradores están de enhorabuena. De momento, además de en
la octava temporada de Castle, el actor forma parte de la webserie Con
Man, filmada el pasado mes de junio y presentada, dirigida y escrita por
Alan Tudyk. En esa comedia, Fillion
interpreta a un actor de ciencia ficción, género que ya abordó en la
película Serenity, que se desarrolla en una guerra civil
galáctica, y enFirefly, la serie que originó ese largometraje. Como
actor, le sobra experiencia en sus más de dos décadas de trabajo.
http://www.elmundo.es/television/2016/01/19/569d42dbca47418e438b45dd.html
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